Origen
Como su primo, el cornish rex, el devon rex surgió en Inglaterra. Su progenitor es un gato conocido como Kirlee, un felino de pelaje ondulado que nación en Devonshire en 1960. Su madre era una gata de una mujer que se llamaba Beryl Box, y su padre un gato vagabundo con el mismo pelo rizado. Kirlee compartía la misma composición genética que el cornish rex, que nació una década antes en la cercana región de Cornualles. Las diferentes pruebas de apareamientos demostraron que Kirlee era el resultado de una mutación genética natural y que se podía considerar una raza en sí. Así, el devon rex nació en 1979, cuando las asociaciones internacionales del gato reconocieron oficialmente esta raza.
Carácter
El devon rex es un gato muy inteligente y social. Le interesa mucho todo lo que pasa a su alrededor y le encanta sentarse o tumbarse a la altura de la cabeza o del hombro de su persona favorita. Es cariñoso y seguro que se te acerca mucho si te comunicas con una voz suave y tranquila.
Es un gato juguetón y extrovertido, y se lleva bien con otras mascotas, con niños y con visitas de personas. Se niega a que le dejen sin participar en alguna actividad y, dada su inteligencia, le encantan los juegos exigentes, como los puzles o los juguetes interactivos, jugar a traer cosas y aprender diversos trucos. Dicen que parece un elfo o un hada, tanto en su aspecto como en su carácter. Así que no te sorprendas si es un poco travieso y hace alguna jugarreta, sobre todo si se aburre. Dado que es un gato muy social, no le gusta quedarse solo durante mucho tiempo.
A la hora de cenar, seguramente se una a la mesa con el resto de la familia. Por eso hay que estar atento a que no se acerque a los platos y a que no coma nada que no sea su comida.
Aspecto, tamaño y peso
El devon rex es un gato de tamaño de pequeño a mediano con unas orejas grandes y bajas muy características, y unos grandes ojos curiosos. Algunos gatos tienen unos mechones de pelo en las orejas que parecen orejeras. Tiene una cabeza pequeña, ancha y cuneiforme con los pómulos altos, la barbilla fuerte y la nariz pequeña. El cuerpo es esbelto y musculoso, con patas largas y el pelo corto y aterciopelado con muchas ondas y rizos. Tiene las patas de atrás algo más largas que las de delante. Cuando son adultos, los machos pesan entre 3,5 y 5 kg y las hembras, entre 2 y 3,5 kg.
Color
El pelaje del devon rex puede darse en casi todos los colores y patrones genéticamente posibles. De blanco, negro, azul o chocolate a lavanda, rojizo, atigrado, carey o colorpoint. El color de los ojos depende del pelaje y puede ser de cualquier color, incluidos los tonos agua y azules.
Cuidado del pelaje
El devon rex no requiere un cuidado complicado, ya que no mudan mucho de pelo y se seca rápido después de bañarlo. Sí que mudan, pero la estructura del pelaje es menos molesta que la de otras razas. Algunos gatos tienen rizos enmarañados y otros un pelaje fino y suave. Tienen el pelo más grueso en el lomo y en los laterales.
Cuando toque cepillarlo, hay que hacerlo con cuidado porque tiene el pelo delicado y se puede estropear si se hace con fuerza. Algunos pueden tener la piel grasa en los pliegues o en las garras. En esos casos, bañarlos cada dos semanas es una buena solución.
Particularidades de esta raza
Al devon rex le encanta el calor, mucho más que a sus compañeros de pelaje normal. Por eso, prefiere entornos cálidos y a cubierto que pasar frío al aire libre. Siempre va a los puntos más cálidos que puede encontrar y prefiere dormir con una manta en su cama. Pero hay que protegerlo de la luz directa del sol, porque se quema con facilidad.
Estos gatos pueden saltar muy alto. Seguro que tu estantería más alta no es un reto para ellos.
Enfermedades hereditarias
Por lo general, el devon rex es una raza sana, pero puede padecer algunas enfermedades hereditarias. Una de ellas es la conocida como hipotricosis o calvicie hereditaria. La raza también puede tener un alto riesgo de padecer la enfermedad del corazón conocida como miocardiopatía hipertrófica (MCH) y una enfermedad muscular denominada miopatía de devon rex. La miopatía se empieza a notar durante el primer año de vida del gato y provoca debilidad muscular y cansancio. Se han dado casos de displasia de cadera, una malformación de la cavidad de la cadera que debilita la articulación de esta, así como la enfermedad renal poliquística (PKD, por sus siglas en inglés) y la luxación de rótula, que hace que se les disloque la rótula de vez en cuando. El devon también puede padecer dermatitis por Malassezia, un hongo unicelular que hace que la piel sea grasa y que se infecten y le piquen las orejas, pero se puede curar con tratamientos antihongos y champús tópicos.
Alimentación
Si le preguntas a cualquiera que tenga un devon, te dirá que estos gatos son amantes de la comida. Un gato que no duda ni un instante si puede hincar el diente (o la garra) en algo de comida, como tu bocata o las sobras de la cena. Estos gatos tienen cierta tendencia a suplicar como los perros. Por eso hay que estar atento a la comida y alimentarlos con una dieta gatuna de buena calidad. Es importante no alimentarlos de más.
Dado su carácter activo, el devon rex necesita alimentos nutritivos, ricos en proteínas, con todas las vitaminas y minerales necesarios. Aliméntalo de manera que puedas controlar su peso y darle una vida saludable. Para más información sobre su alimentación, consulta a tu veterinario.