Podemos beneficiar al paciente de rehabilitación con la electroterapia en sus dos modalidades:
TENS (transcutaneous electrical nerve stimulation). Su objetivo es el alivio del dolor mediante la sobre-estimulación de terminaciones nerviosas nociceptivas. Los electrodos se colocan sobre el área dolorosa o sobre el nervio periférico o raíz nerviosa que inerva la zona dolorosa. El uso de TENS es beneficioso como técnica analgésica con la que reforzar la analgesia que ya esté recibiendo el paciente, en procesos de reagudización de la patología
NMES (neuromuscular electrical stimulation). Tiene como principal beneficio el fortalecimiento muscular mediante estimulación de las fibras motoras. Esta estimulación eléctrica causa una despolarización del nervio motor que da lugar a una contracción del músculo, por lo que está recomendado para combatir la hipotrofia muscular que los pacientes con osteoartrosis suelen presentar.